Hola familia, desde mi llegada de Hawaii estaba deseando pasar por aquí para saludaros y contaros cosas sobre mi viaje, pero sobre todo para daros las gracias.
Un poco por nada en especial y un poco por todo; sobre todo, por estar ahí y porque en estos días de desconexión fuera de casa me han dado para pensar mucho…Os cuento poco a poco…Aunque hoy en día todo quiera ir rápido rápido…;-)
¡Gracias!
La primera cosa que me hizo reflexionar sobre la gratitud fue una conversación con mi hermana en la que hablábamos sobre lo exagerada o no que es la tradición de Halloween en EEUU.
La verdad es que es alucinante cómo lo viven. Un día fuimos a hacer una visita a la decoración de las casas más valoradas del barrio donde viven en Dallas, ya que hacen un ranking y todo y os aseguro que algunas se gastan miles y miles de euros en luces y muñecos, pasajes del terror y hasta efectos especiales…
Una de las cosas que me dijo, es que poco después venía Acción de Gracias y la pasión con lo celebraban era la misma.
Dejando aparte la discusión de Halloween, ambas coincidimos en que ACCIÓN de GRACIAS sí era una festividad bonita. Nos gustaba por la parte de destacar la GRATITUD y hacer una festividad de ello, pero por la parte de ACCIÓN, como una invitación real a llevarlo a cabo.
Y es que si nos preguntasen si somos agradecidos, la mayoría de nosotros responderíamos que sí…
Pero vamos a preguntárnoslo de otra manera…
¿Cuántas veces al día agradeces la casa en la que vives, las personas con la que compartes tu día, o la comida que te llevas a la boca? Y yendo un poco más lejos ¿Cuántas veces agradeces a las personas de tu familia, compañeros de trabajo o amigos, el papel que ejercen en tu vida y la ayuda que te brindan?,
Y ¿a ti? ¿Cuántas veces te paras a darte las gracias por el maravilloso trabajo que haces cada día para ser la mejor versión que puedes de ti mismo?
Y no hablo de pensar en agradecerte, sino en hacerlo, en la ACCIÓN de dar o darte las GRACIAS.
Cuando generamos sentimientos de gratitud en nuestros pensamientos, activamos el sistema de recompensa del cerebro, localizado en un área llamada “núcleo accumbens”.
Este sistema es el responsable de las sensaciones de bienestar y placer en nuestro cuerpo. Cuando el cerebro identifica que algo bueno sucede, que existen cosas en nuestra vida que merecen reconocimiento y somos agradecidos por esto, se libera la dopamina, un importante neurotransmisor que aumenta la sensación de placer.
Por eso, las personas que manifiestan gratitud, viven en niveles elevados de emociones positivas, satisfacción por la vida, vitalidad y optimismo.
Pues de todas las cosas que importamos de EEUU, ésta, si me parece una tradición bonita y sin embargo creo que han calado más otras como el BLACK FRIDAY, Halloween o Papá Noel.
Mi regalo de agradecimiento
Pero nunca es tarde. Y por eso, este post lo que he querido empezar dando las gracias a todos vosotros por estar ahí. Y para agradecéroslo, os regalo lo más bonito que puedo regalaros.
Veréis siempre digo que en las cosas que hacemos en la vida trato de poner un tercio de cabeza, un tercio de intuición, y un tercio de corazón.
Pues bien, en estos días quiero regalaros mi parte de corazón y todos los cursos de mi web los podréis encontrar con un descuento de ese tercio, del 33% en todos los programas que ofrezco.
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Agradecimiento por una nueva etapa de mi vida
La verdad es que un viaje como el que he hecho, celebrando mi Honeymoon con mi pareja (algo que todavía no habíamos hecho), sintiendo además las primeras patadas de nuestro bebe moviéndose fuerte y sano y en mi tripita, es una ocasión maravillosa para sentirme agradecida.
Desde la abundancia de los paisajes de Hawaii, que es naturaleza pura, solo podía pensar en lo afortunada que me sentía. Os prometo que tenía la necesidad de gritárselo al mundo.
Es curioso porque si os soy sincera, mis emociones antes del viaje y en los últimos meses estaban más centradas en el miedo.
El hecho de quedarme embarazada sabía que iba a suponer, soltar el control de cuerpo, dejar de poder dar clases y un descenso bastante fuerte en mi cantidad de trabajo, y así ha sido.
Muchas de las cosas que antes hacía, ahora no las puedo hacer y eso como buena autónoma, asusta. Sentía mucho miedo antes de irme, y en el viaje, poco a poco he ido notando como este se iba disolviendo.
Ejercitar el sentimiento de la gratitud, disuelve el miedo, la angustia y los sentimientos de rabia, ayuda a controlar los estados mentales tóxicos e innecesarios.
La gratitud estimula las vías cerebrales para la liberación de la hormona oxitocina, que estimula el afecto, la tranquilidad, reduce la ansiedad, el miedo y la fobia, por tanto nuestro cerebro no es capaz de sentir al mismo tiempo, gratitud y angustia.
Conectar con la gratitud en este viaje me ha servido para darme cuenta, que esto es una oportunidad maravillosa para dar un salto que estaba gestando desde hace mucho tiempo y que no estaba dando por miedo. Mi corazón y mi intuición me dicen que el camino es por ahí.
¡Acompáñame en mi nuevo espacio PHI Método!
Hace 10 años dejé mi cómoda vida de ingeniera para lanzar Inspirafit, mi verdadera pasión, pero hoy, casi 10 años después hay otro salto que siento que debo hacer, un salto con PHI que va más allá de mi misma.
Así que los últimos meses estoy trabajando mucho en algo que como os he adelantado en algún momento llegará en Enero, y tengo muchas ganas de compartir con vosotros.
En poco tiempo PHI ya será un espacio en el que poder entrenar, meditar y compartir experiencias juntas de manera regular.
Algo que me ayudaría mucho en este momento, es que me acompañaras en esta aventura, porque tú eres el motor de todo. Sin gente como tú, no existe Inspirafit, ni PHI, ni ningún otro proyecto…sois vosotros lo que le da sentido.
A partir de ahora, las comunicaciones que tengan que ver con PHI, toda la información sobre ese nuevo proyecto, pasaré a hacerla desde otro correo y por normativa actual de protección de datos, necesito tu autorización para hacerlo legalmente, así que me encantaría que si aún no lo has hecho, te tomases dos minutos para, si tu corazón así te lo dice en este momento, acompañarme rellenando este formulario…
Por tu seguridad, recibirás un mensaje para que confirmes tu dirección de correo electrónico. Es fundamental que confirmes tu suscripción, pues en caso contrario, no podrás recibir mis mails. Si no recibes este mensaje en tu bandeja de entrada, revisa en la bandeja de Spam (en Gmail puede que lo tengas en «Promociones»).
Siento mucha gratitud por lo que hemos vivido estos años y me encantaría seguir aprendiendo contigo.
¿Me acompañas? Mira a ver qué dice tu intuición porque éste, está mucho más cerca de tu corazón.
Nunca el corazón dice una cosa y la naturaleza otra.
Un abrazo
